Las instalaciones de Rescate y Adopción de Mascotas del Municipio (RAMM) se encuentran abarrotadas de perros y gatos que esperan encontrar un hogar lleno de amor y cuidado, por lo que se invita a la comunidad juarense a adoptar alguno de estos animales.
Actualmente se tienen 35 perros adultos, 46 cachorros, 5 hembras con seis cachorros cada una, 10 cachorros de gato y una gata, por lo que la necesidad de adopciones responsables se vuelve apremiante, dijo la médico veterinaria Gisel Rubio, encargada del RAMM.
Indicó que los perros y gatos que tienen en este albergue son mascotas rescatadas por distintas cuestiones, entre ellas el abandono y maltrato; ahora se busca encontrarles hogares permanentes donde reciban un mejor trato, ya que son animales que han experimentado momentos difíciles.
La encargada del RAMM comentó que estos perros y gatos han recibido atención médica, alimentación y cuidado, pero anhelan un espacio donde puedan ser parte de una familia amorosa y leal.
Para garantizar que las adopciones se hagan de manera responsable y segura, dijo que en el RAMM solicitan a los interesados que cumplan con ciertos requisitos, entre ellos la presentación de un comprobante de domicilio, una identificación oficial y la firma de una carta responsiva.
Estos requisitos no solo buscan asegurar que las mascotas sean adoptadas por personas comprometidas, sino que también garantizan el bienestar de los animales y su adaptación a un nuevo entorno, señaló.
El comprobante de domicilio y la identificación oficial ayudan a verificar la identidad y la residencia del adoptante, mientras que la carta responsiva establece el compromiso de brindar los cuidados adecuados y la atención necesaria al nuevo miembro de la familia.
Los interesados pueden visitar el RAMM para conocer a los perros y gatos disponibles, interactuar con ellos y evaluar la compatibilidad y la conexión especial que pueda surgir. El personal capacitado está disponible para proporcionar orientación y asesoramiento durante todo el proceso, dijo la encargada del albergue.
La adopción de una mascota es una responsabilidad significativa, pero también es una experiencia gratificante y llena de amor. Al brindarle un hogar a un perro o gato rescatado se les da una segunda oportunidad de vivir una vida plena y feliz, destacó.
Además, agregó, al adoptar en lugar de comprar, se contribuye a desalentar la cría irresponsable de mascotas y se fomenta la adopción como una opción ética y solidaria.
